En la ingeniería geotécnica, se utilizan dominios geotécnicos para categorizar diferentes áreas de un yacimiento minero en función de sus características geotécnicas.
Estos dominios permiten comprender mejor el comportamiento del macizo rocoso y diseñar estrategias adecuadas para la estabilidad de las excavaciones.
A continuación, mencionaré algunos ejemplos de dominios geotécnicos comunes y su correlación con la geometría de los pits y las fases:
- Dominio de roca competente: Este dominio se caracteriza por la presencia de rocas duras y resistentes, con baja fracturación y deformabilidad. Generalmente, se encuentra en las zonas más profundas del pit y en las fases iniciales de la explotación. La geometría del pit en estos dominios suele ser más estable, con taludes menos inclinados y requerimientos de sostenimiento menores.
- Dominio de roca alterada o fracturada: En este dominio, se encuentran rocas que han experimentado alteraciones geológicas, como meteorización, fracturación o zonas de debilidad. Estas áreas pueden presentar una mayor inestabilidad y requerir un diseño de taludes más conservador, con taludes más empinados y mayor sostenimiento.
- Dominio de suelos y rocas débiles: En este dominio, se encuentran suelos o rocas de baja resistencia, como arcillas blandas o rocas altamente fracturadas. Estas áreas suelen requerir un diseño de taludes más conservador y el uso de técnicas de estabilización adicionales, como sistemas de drenaje y refuerzos.
Es importante destacar que los dominios geotécnicos pueden variar en cada yacimiento y deben ser analizados en función de las características geológicas específicas de cada sitio.
La correlación entre los dominios geotécnicos y la geometría de los pits y fases permite adaptar las estrategias de diseño y sostenimiento a las condiciones particulares de cada área, maximizando la seguridad y la eficiencia de las operaciones mineras.