Si el suelo no tiene suficiente capacidad de soporte para una cimentación convencional, se pueden considerar diferentes opciones de cimentaciones especiales.
Algunas de las opciones comunes son:
- Cimentaciones profundas: Estas cimentaciones se utilizan cuando el suelo superficial no tiene suficiente capacidad de carga. Las cimentaciones profundas incluyen pilotes, micropilotes, pilas, pilotes de fricción, entre otros. Estas cimentaciones transfieren la carga a capas más profundas del suelo que tienen una mayor capacidad de soporte.
- Cimentaciones sobre pilotes: Esta opción implica la instalación de pilotes en el suelo hasta una capa más resistente o hasta una profundidad donde se alcance una capacidad de carga adecuada. Sobre estos pilotes se coloca una losa o una viga de cimentación para distribuir la carga de manera uniforme.
- Cimentaciones flotantes: Estas cimentaciones se utilizan en suelos blandos o inestables. Consisten en una losa de cimentación que se extiende sobre una gran área para distribuir la carga de manera uniforme y reducir la presión sobre el suelo.
- Cimentaciones con geosintéticos: Los geosintéticos, como las georedes o los geotubos, se utilizan para mejorar la capacidad de carga del suelo. Estos materiales se colocan en capas dentro del suelo para aumentar su resistencia y estabilidad.
Es importante realizar un estudio geotécnico detallado para determinar la opción de cimentación más adecuada en función de las características del suelo y las cargas esperadas.
Recuerde que cada caso es único y requiere un análisis específico.
